La magia del cine
Mago para fiestas
El arte de la magia no sólo ha facilitado estudios científicos como recogíamos en un artículo previo. Fue el ilusionismo quien llevó los efectos especiales al mundo del cine cuando se trataba de grabaciones exclusivamente documentales.
Si fueron los hermanos Lumière quienes inventaron el cinematógrafo, sería George Méliés quien convirtió el cine en un espectáculo.
Mélies, que fue pintor y director de teatro entre otras muchas profesiones, también fue un experto mago convirtiendo sus actuaciones en autenticas fiestas de ingenio y creatividad.
En 1888 compró el pequeño teatro de magia propiedad de su mentor, Jean-Eugène Robert-Houdin, donde logró con diferentes trucos e ilusiones escenas increíbles nunca vistas en escenarios como objetos que levitaban o cabezas separadas de su cuerpo.
Sin embargo, en 1923, acosado por las deudas, tuvo que vender sus propiedades. Y aunque su figura fue pocos años después reconocida por la vanguardia cinematográfica francesa murió en la más absoluta miseria en enero del 1938.
Desde 1946, el premio Méliès otorga anualmente el reconocimiento a la mejor película francesa.
Podéis disfrutar de su magia en el siguiente enlace: Méliès